Practica la gratitud cada día. Nada te hará más feliz que estar agradecido por todo lo que la vida te ofrece, por lo que tu camino te muestra y por todos los retos que superas… que con ellos crecemos.
Con los años y sobre todo con la experiencia, he podido comprobar que no hay mejor actitud que la de practicar la gratitud.
Dicho esto, deseo que este artículo te ayude a mantener una actitud de gratitud diariamente para que alivies tus niveles de estrés, para que puedas descansar y dormir más tranquilo y para que te sientas más satisfecha de tus relaciones personales.
Gratitud cada día
Tengo claro que ser agradecido es la clave de mi felicidad. Algo que cuesta tan poco y que puede transformar por completo nuestro día y tener un fuerte impacto en nuestro bienestar. Según un estudio publicado en el Clinical Psychology Review, las personas que mantienen una actitud diaria de agradecimiento tienen menor riesgo de padecer depresión y ansiedad, son personas menos agresivas, altruistas, con empatía y amabilidad.
Muestran mayor confianza hacia los demás, sienten una motivación/llamada interior por hacer y lograr más pero, de una forma menos ambiciosa y más salaudable y suelen mantener relaciones personales muy satisfactorias.
Se ven menos afectados por las críticas y son menos sensibles a la negatividad de las otras personas, con lo que duermen mejor y tienen menos riesgo de adicción al alcohol, drogas o padecer trastornos alimentarios.
¿Podría haber otra manera más fácil y económica de incrementar nuestra salud y felicidad?
Lo sé, no siempre es fácil sonreírle a la vida, sobre todo después de recibir una mala noticia o haber pasado un mal día, pero prometo que cuanto mayor es la actitud por mantener esta buena predisposición, más pronto se volverá una rutina y verás como finalmente cambiará tu perspectiva de vida de manera positiva.
Qué es la gratitud
Todos tenemos claro que ser agradecida es dar las gracias a alguien que nos ha echado una mano, que nos ha apoyado o ayudado en algún momento y en una situación determinada. Pero por gratitud no me refiero solamente a este tipo de situaciones.
Ser agradecida es interactuar con la vida, estar agradecida por la comida que tienes, por el agua limpia y fresca que sale del grifo y la ducha para asearte cada día, por la ropa que te protege y abriga cuando hace frío, por el aire que llena tus pulmones en cada una de tus respiraciones…
A esta actitud me refiero. Agradecimiento a todo y en cualquier momento. ¿Tú la practicas?
Puedes estar gradecida por levantarte cada día con los rayos de sol que entran por la ventana, por el sonido de la fuente de agua en el jardín, por todos los nutrientes que te aportan tus comidas.
Agradecida por ese mensajito en el móvil lleno de amor, agradecida por la casa que tienes, la familia, las amistades, el trabajo, por tus días libres o tus vacaciones.
Los mismos sujetos del estudio mostraron una relación directa entre ser agradecidos y sentir más satisfacción en su vida, más autoestima y crecimiento personal, más alineados a sus valores y propósito de vida.
¿Quieres empezar a practicar?
La gratitud se ejercita
Hay algunos ejercicios que pueden ayudarte a poner en práctica una actitud de gratitud de forma diaria. No te tomarán demasiado tiempo y a cambio, verás cuántas cosas encontrarás.
Antes de levantarte de la cama
Empieza el día con un pensamiento positivo. Recuerda algo bonito presente en tu vida, puede que sean los pajaritos cantando en la ventana, esa canción que suena en la radio del vecino o incluso esa mantita que te está cubriendo y calentando el cuerpo.
Ten un gesto bonito hacia otra persona
Cede tu asiento del bus a alguien que lo necesite más que tú, deja una nota con un mensaje positivo a un compañero de trabajo que no esté demasiado animado o incluso, sonríele a un extraño. Repartir alegría y mostrar aprecio a los demás no solamente les alegra a ellos sino que te enriquece también a ti.
Diario de gratitud
Estrena un diario donde cada noche o al final de la semana escribas cinco cosas por las que estás agradecida. Ese nuevo logro en el trabajo, esa tarde donde pudiste compartir un ratito con una amiga o la pareja, esa llamada que tanto esperabas o esa cena tan deliciosa que preparaste.
Comparte con tu pareja
Cada noche tres motivos por los que estás agradecido y quizás pueden ser motivo para fortalecer la relación, sobre todo si se nombran cosas por las que estáis agradecidos uno del otro.
Piénsalo dos veces
Si un pensamiento negativo te viene a la mente reflexiona. ¿Estás haciendo una montaña de un granito de arena? ¿Hay algo de cierto en tu pensamiento que puedas usar para cambiar esa situación? ¿Lo que piensas es real o es algo imaginario?
Por ejemplo, has tratado de hacer algo y no ha salido bien. En vez de pensar “Soy un desastre”, recuérdate que si algo no sale a la primera, eso no es ser un desastre, hay muchas más oportunidades y que lo estés haciendo, significa que te acerca a tu objetivo. ¡Practica la gratitud!
Cada día puedes dar las gracias por estar viva, respirar, cada día tienes un motivo para sonreír, una nueva oportunidad de mejorar, de avanzar, de disfrutar, de aprender, de descansar, de ser lo que quieres ser.
“Una actitud de gratitud siempre atrae más momentos por los que seguir estando agradecida en tu vida.”
Como siempre, tus palabras son un balsamo para el alma, una delicia. Mil gracias. ❤
Que bonito tu comentario Elena, muchas gracias y feliz de que te haya gustado. Un abrazo.
Precioso artículo
Gracias Candelaria, que tengas una buena semana. Abrazos
Gracias… muchas gracias¡¡¡¡¡… por ayudarnos a estar presentes …
Gracias a ti Gabriela por visitar la web y feliz de que te haya gustado el artículo. ¡Que tengas buena semana! Abrazos ♥
Gracias ,gracias por cultivar nuestro es espíritu con este excelente mensaje.
Gracias por tu comentario Luz. Cada uno cultiva su Espíritu, desde el blog aportamos ideas y motivación. Me alegra que encontréis en los artículos inspiración, de eso se trata. Te envío a brazos y buen fin de semana ♥