Abrazar a los árboles no es una moda pasajera ni es algo de los hyppies.
¡Tiene muchos beneficios para la salud! y a las personas que abrazan a los árboles, se les llama Treehugge.
Un término que se usaba de forma peyorativa para nombrar a los defensores de la naturaleza que quieren protegerla aunque a partir de ahora, los mal intencionados, tendrán que replanteárselo.
Los científicos avalan el papel fundamental de la naturaleza y en especial el de los árboles para nuestra salud y bienestar.
Se ha demostrado que al abrazar a los árboles, se modifica nuestra frecuencia vibratoria, esta se vuelve más alta y más pura.
Pero lo más importante es que, no solo nos beneficia a nosotros sino que también, es beneficioso para la naturaleza.
Tanto el acto de abrazar a los árboles como si permaneces cerca de ellos durante un mínimo de 20 minutos, mejorará tu bienestar general.
“Los espacios verdes pueden ser tan eficaces como los medicamentos recetados en el tratamiento de algunas enfermedades mentales”.
Se ha publicado un libro con el título “Cegados por la ciencia” donde se recogen varios estudios de diferentes científicos y universidades del mundo presentando los resultados obtenidos.
Está demostrado que esta práctica, la de abrazar a los árboles, es muy beneficiosa en personas que presentan enfermedades mentales, hiperactividad o trastornos de atención, falta de memoria y concentración, depresión y dolores de cabeza frecuentes, entre otros síntomas o afecciones.
Los mayores beneficios a la hora de abrazar a los árboles, se han obtenido en los niños, estos mejoran a nivel psicológico y fisiológico de forma más rápida cuando interactúan con la naturaleza en general y siempre muestran mejorías a nivel emocional cuando permanecen tiempo en entornos verdes a la vez que, vuelven mucho más creativos.
Por qué la naturaleza nos sana
Cada vez que estás en contacto con la naturaleza te relajas, te calmas y tu ritmo cardíaco baja su frecuencia aunque no seas consciente de ello.
Pronto entras en resonancia con la frecuencia y ritmo propio de la naturaleza, es el llamado “Efecto de resonancia“.
Abrazar a los árboles
Tan solo con estar presente en un entorno verde y saludable, empiezas a sintonizarte con todo el mundo vegetal, con la frecuencia que predomina en ese lugar y esto es lo que se ha demostrado, que la frecuencia que emiten los árboles y la naturaleza es mucho más elevada que la tuya y es mucho más armoniosa.
Estar en contacto con la naturaleza siempre es beneficioso y necesitamos recuperar la sana costumbre de honrarla e interactuar con ella. ¡No dejes de abrazar a los árboles!
¿Será por todo esto que los koalas, que viven abrazados a los árboles, son tan tranquilos?