Si sientes que te encuentras al final de un camino, este artículo es para ti.
Le podría haber llamado “10 maneras de saber que tu vida se ha quedado sin gasolina”, porque así es como uno se siente al estar al final de un camino o de una etapa, como un coche que se ha quedado sin gasolina y no va a ninguna parte.
Esto sólo significa que el camino en el que estás ya no tiene nada más que ofrecerte y ya no puedes crear en ese espacio energético.
Estar al final de un camino no tiene que darte miedo, es un gran cambio para ti.
Cuando aparecen nuevas opciones sabes que ha llegado el momento de hacer algunos ajustes y quizá te preguntes por qué no has visto esas oportunidades antes.
Aquí tienes diez ejemplos para saber que te encuentras al final de un camino y que ya estás lista/o para transitar otro nuevo.
Al final de un camino
- Ya no te gusta tu vida, te sientes limitado y sabes que hay algo mucho más satisfactorio para ti en otro lugar, aunque puede que no sepas todavía qué es.
- No estás a gusto con tu vida, lo que podría incluir tu trabajo, tu situación financiera, tus relaciones o donde estás viviendo actualmente.
- Las cosas que solían hacerte feliz, ahora, apenas te dan alguna alegría.
- Te sientes desconectada/o de la gente de tu entorno más cercano y puede que ya ni siquiera quieras estar con ellos.
- Te sientes estancada/o, desmotivad/o para moverte en otra dirección aunque desees mucho un cambio. Sabes que estás al final de un camino pero no encuentras otro por donde caminar.
- Sientes desmotivación, apatía y has perdido tu alegría y tu creatividad. Hacer las cosas más sencillas y cotidianas las sientes como si estuvieras caminando por un terreno pantanoso.
- Estás como ausente, confundida/o y tus pensamientos son poco claros. Tienes dificultad para concentrarte y enfocarte en las cosas más pequeñas y cotidianas. ¡Solo estás viendo al final de un camino, no ves lo que hay más allá!
- Pasas tiempo soñando despierta/o con estar en cualquier otra parte menos en donde estás en estos momentos.
- Sientes la necesidad de levantar el vuelo, irte a otro lugar y dejar tu vida actual para descubrir qué te hace feliz.
- Al final de un camino siempre aparece la necesidad de limpiar tu espacio vital, de deshacerte de las cosas que ya no quieres y que ahora, no necesitas.
Al final de un camino siempre hay otro
¿Y ahora por dónde seguir? ¿Cómo superar la falta de motivación e infelicidad general que te está abrumando?
Aunque lo estés viviendo como un momento incierto, éste es realmente el momento más poderoso porque tu miedo al cambio, es muy pequeño en comparación con cuánto deseas avanzar.
Y es entonces cuando sucede. No importa cuán poderoso y prometedor sea el nuevo futuro porque, hasta que no te das cuenta de que estás al final de un camino y empiezas a considerar otro nuevo, todo seguirá igual.
El siguiente paso es observar qué acciones puedes hacer para promover el cambio.
Hacerte estas preguntas puede ayudarte:
- ¿A qué has estado apegada/o y que ahora ya puedes soltar?
- ¿Qué resultados buscas al valorar tus nuevas prioridades?
- ¿Qué quieres ahora para ti?
Empieza a tomar acciones inspiradoras, que nutran tu vida, que aporten bienestar y confort sin olvidar que tu camino de vida, es tuyo, de nadie más.
Siempre puedes compartirlo con otras personas pero nadie hará el camino por ti. Cuando sientas que estás al final de un camino, suelta la resistencia a cambiar porque ese cambio, te ayudará a expandir tu potencial.
Estoy al final de un camino, no quiero vivir en este apartamento no me gusta nada mi trabajo y no soy feliz. Quiero cambiar mi vida pero no encuentro mi luz.