¡Sólo necesitas 17 segundos al día para hacer cambios positivos!
Esta práctica parece simple y lo es pero además de simple, es efectiva.
La dificultad está en que, no siempre consigues mantener un buen pensamiento el tiempo necesario para que éste se convierta en hábito.
Si dos o tres veces al día te centras durante 17 segundos en pensamientos puros, nobles y alegres acerca de cualquier tema que necesites resolver, entonces habrás hecho lo necesario para que tu día, vaya a mejor. ¿Por qué 17 segundos?
Un pensamiento alcanza el combustible suficiente cuando centras tu atención durante 17 segundos. Ese pensamiento traerá consigo a otro pensamiento que, por afinidad, será más poderoso que el anterior y, al final de otros 17 segundos (o sea 34 segundos en total), el pensamiento evoluciona hacia algo positivo.
Después de esto, si agregas otros 17 segundos (que harían un total de 51), continúa el proceso evolutivo y natural de pensamientos positivos.
Si finalmente puedes continuar hasta llegar a un total de 68 segundos (en cualquier aspecto de tu vida que desees cambiar), entonces habrás hecho un gran trabajo y ese deseo, está camino a su realización.
¡En realidad, sólo necesitas poco más de 1 minuto al día! La clave es el enfoque positivo puro (energía positiva), sin resistencia y sin que, durante este lapso de 68 segundos, cruce por tu mente ni un pensamiento de carencia o negatividad de ningún tipo.
La mayoría, rara vez finaliza una afirmación sin meter por medio energía contradictoria (pensamientos contrarios a lo que se desea o pensamientos de dudas), a no ser que estén muy entrenadas en meditación.
Así que la mayoría, a excepción de unos pocos, no han experimentado este proceso de 68 segundos puros de energía no contradictoria. 17+17+17+17 = 68 segundos
Si aprendiéramos a utilizar este proceso durante tan sólo 68 segundos cada día, todo lo demás, se volvería irrelevante. ¿Cómo lograr 17 segundos de pensamientos puros? Lograr 17 segundos de consciencia plena en un tema en concreto, es más fácil si lo haces por escrito.
Si vas a hacerlo por escrito, hazlo en forma de carta, como si se lo cuentas a algún amigo, como que eso que estás pensando, ya ha sucedido en la realidad. Entonces describes tus emociones con todo detalle y te sumerges tanto en la descripción que estás sintiendo y disfrutando, como si de verdad lo estuvieras viviendo.
Cuatro veces 17 segundos
Como en todo, se trata de un aprendizaje y fundamentalmente, de practicarlo, de ser constante. Cada día, 68 segundos no representan gran cosa pero, te llevará a adiestrar tu mente, a vaciarla y centrarte sólo en aquello que deseas que se haga realidad. Si no empiezas, nunca llegarás. ¡No es el hábito el que hace al monje, sino la práctica!
Es conmovedor lo sencilla que es la vida…!! Dame 68 segundos de tu paz al día, y te
restituiré le que es tuyo.
La vida es sencilla y fácil y, cuando interviene el ser humano… ¡La lía! Aunque hay excepciones, pocas pero las hay. Abrazos.
Semillas Solares