Perfumes, colonias, aguas florales o aceite esenciales ¡No uses siempre el mismo! Es como desestimar la capacidad de tu cerebro para crear nuevas conexiones.
Es probable que ni siquiera recuerdes cómo tu cerebro aprendió a asociar el aroma del café con el comienzo de un nuevo día, pero lo cierto es que cada olor, cada perfume que atraviesa tu pituitaria, hace vibrar tu cerebro y lo activa.
“Los perfumes y aromas provocan inconscientemente efectos en el comportamiento humano, pueden relajarnos, estimularnos, asustarnos o alegrarnos. Así que, ¿por qué no probar perfumes y aromas diferentes para crear nuevas conexiones cerebrales?
La cantidad de aromas que es capaz de distinguir el ser humano es incalculable, no en vano, el olfato es uno de los sentidos más poderosos del ser humano. “Tiene una gran conexión con la memoria, lo que permite a nuestra mente recordar situaciones, lugares, emociones o momentos determinados de una forma más rápida que con cualquier otro estímulo”.
“Las moléculas volátiles se disuelven en la atmósfera. Cuando respiramos el aire que contiene estas moléculas, pasa a través de la nariz y los receptores olfativos las detectan, envían una señal a nuestro cerebro a través del sistema nervioso de una manera más directa y rápida que con los otros sentidos. El cerebro registra el estímulo y lo codifica”.
Es importante aprender a descifrar los olores, perfumes y aromas de forma consciente. “Un buen ejercicio consiste en prestar atención a los aromas que nos rodean, tanto nuevos como habituales, e intentar describirlos”. Parece fácil pero no lo es.
¿Tienen los perfumes beneficios en nuestro organismo, más allá del placer que provoquen o del recuerdo que evocan? “El olfato tiene un gran poder evocador y una fuerte asociación con la memoria. Un buen perfume o aroma eleva el ánimo y modifica la forma de pensamiento”.
Nuevos perfumes, nuevos aromas
“Los trabajos de los neuroanatomistas clásicos, han permitido establecer con gran precisión la estructura microscópica de los centros nerviosos de la corteza cerebral”. “Los olores o perfumes, están compuestos por varias moléculas y cada una de ellas activa receptores específicos que proporcionan la base de nuestra capacidad de reconocer y recordar, situaciones diferentes.
Ante uno nuevo, nuestro cerebro trata de compararlo con otros ya conocidos, registrándolo y asociándolo a la situación en que lo hemos captado por primera vez”. Esto provoca una oportunidad para ejercitar la masa gris y activar nuevas conexiones. “probar con más frecuencia diferentes perfumes y aromas a los que no estamos tan habituados, puede ayudarnos a establecer nuevas conexiones en nuestro cerebro”.
“Podríamos crear nuevas asociaciones de forma más consciente, introduciendo un olor específico en situaciones felices y así, podríamos retomar esa emoción de felicidad, tan solo respirando otra vez el perfume con la que la hemos asociado. En la mente se crearía una nueva conexión”. “El cerebro es enormemente plástico y está continuamente construyendo conexiones que las relaciona entre sí”.
“Aunque con la edad puede aparecer una pérdida del sentido del olfato (algunos estudios revelan una disminución de hasta el 50% en personas mayores de 65 años), esto no impide seguir incorporando nuevos perfumes a nuestra memoria olfativa, especialmente por las mañanas, cuando somos más sensibles a la detección de olores”. El País.
Puedes preparar tus propios perfumes y combinar diferentes aromas y así crear nuevas conexiones que te aporten más bienestar y totalmente, de forma natural. Te explico cómo hacerlo en este enlace.
Deja un comentario