¿Preparar nachos de Sésamo? Si es posible ¿Por qué no? De sésamo blanco y negro y además, sin gluten. Finísimos, crujientes y ligeros. Estoy segura que los harás más de una vez.
Se conservan muy bien durante varios días, tienen un sabor delicado, más suave que los nachos de maíz y combinan tanto con preparaciones saladas como dulces.
Hay dos versiones para preparar estos nachos ultra crujientes. Puedes usar arroz cocinado o, usar solo harina de arroz. Prueba a prepararlos de las dos formas y elige cuál te gusta más.
Otra idea que te doy es usar arroz salvaje o arroz rojo, quedarán unos nachos de color morado increíbles o también, puedes añadirle un Superalimento como por ejemplo el maíz morado que le aportará más propiedades nutritivas a esta receta. El resultado son unos nachos delicados y ligeros que me recuerdan a “pequeñas alas de ángeles” y esto, habla por sí solo…
Cómo preparar nachos de sésamo
Ingredientes: Para unos 30-40 nachos aproximadamente
- 1/3 de taza de arroz cocido (opcional)
- 140 gr de Harina de arroz
- 1 1/2 Cucharada de Sésamo Negro
- 1 1/2 Cucharada de Sésamo
- Pizca de Sal
- 2 Cucharadas de Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE)
- 1/4 taza de agua (orientativo)
Si eliges la opción de hacerlos incorporando arroz cocido tendrás que triturarlo en un procesador de alimentos hasta que quede como una “papilla pegajosa”. Añade la harina de arroz, la sal y el aceite y sigue procesando todo junto mientras viertes poco a poco el agua.
Debes conseguir una masa firme y consistente, con la textura similar a la masa de pan para poder moldearla. Si fuera necesario añades más agua o más harina. Si no quieres usar arroz cocido, usa solo harina de arroz y en vez de 140 gr, necesitarás 200 gr.
Retira la masa del procesador y añade las semillas de sésamo. Amasa para que se mezclen bien por toda la preparación. Deja reposar 20 minutos cubierto con un paño. Corta papel de hornear del tamaño suficiente para cubrir una bandeja de horno.
Coloca encima la mitad de la masa y cubre con otro papel de hornear. Con la ayuda de un rodillo, extiende la masa lo más fina posible hasta que quede cubierta toda la superficie. Quita el papel de horno que cubre los nachos y con un cuchillo, marca una cuadrícula de tamaño medio para poder separarlos en pociones una vez cocinados. Hornea durante 4 o 6 minutos a 150º.
Ten en cuenta que los nachos son muy finos y se cocinan muy rápido, en cuanto la superficie cambie de color, ya casi están listos. Repite el proceso con la otra mitad de la masa. Una vez fríos, separa las porciones. Un snack ligero para acompañar un hummus, una salsa de pimientos o como he hecho yo en este caso, con guacamole. Descubre más recetas saludables y naturales en este enlace.
Deja un comentario